Cristina Bergillos Flores, una destacada enfermera de 42 años con una sólida formación en enfermería geriátrica y atención sociosanitaria a domicilio. Su compromiso con la atención a personas mayores y crónicas la llevó a embarcarse en un Máster Universitario en Atención Integrada en la Cronicidad y el Envejecimiento en TecnoCampus. Este programa se destaca por su enfoque en la investigación y aborda los desafíos cambiantes en el sector de la salud.

Cristina representa un ejemplo inspirador de profesional que busca enriquecer su práctica y conocimientos para enfrentar los desafíos actuales en el campo de la atención a la salud, a través de la innovación.

 

 

¿Cómo has conocido TecnoCampus?

Lo conocí a través de una compañera de trabajo, buscábamos hacer un máster universitario orientado a la investigación y en nuestro ámbito de trabajo: la cronicidad.

¿Por qué has elegido esta universidad?

No tenía referencias sobre la universidad, y aunque debo desplazarme para asistir a las clases, he hecho una buena elección.

El primer día de máster nos presentaron los diferentes espacios de la universidad y nos dieron una muy buena acogida para situarnos en el campus.

¿Qué aspectos diferenciales tiene este máster, especializado en atención integrada a la cronicidad y el envejecimiento, que no tienen otros?

Es un máster que abarca las situaciones cuotidianas de mi ámbito de trabajo. A pesar de mi trayectoria en el mismo, he aprendido muchos aspectos relacionados con el envejecimiento, que han ampliado mis metas personales y profesionales.

Además, al ser un máster orientado hacia la investigación, personalmente me ha aportado mucha riqueza de conocimientos y conceptos, pues era un área en la que no había podido realizar formación continuada.

¿En qué momento se encuentra tu sector? ¿A qué retos crees que se enfrenta?

Uno de los aspectos que más valoro en referencia al máster, y relacionados con el sector en el que trabajo, es que permite conocer en profundidad como es la situación actual en nuestro país y hacia donde debemos orientar los recursos.

Considero que aunque la cronicidad está presente en cada uno de los niveles asistenciales, no estamos demasiado preparados para afrontar una situación emergente, que va a ser compleja. El aumento exponencial del envejecimiento y las políticas sanitarias y sociales no van de la mano, pero creo que ya está cambiando el enfoque que deberíamos darle.

¿Cuál ha sido tu recorrido hasta ahora?

Empecé como enfermera asistencial después de finalizar mis estudios de Enfermería en el centro socio sanitario donde sigo trabajando desde hace ya 22 años, sin tener muy claro en aquel momento si sería una especialidad de mi agrado. Después de unos meses supe que era mi lugar y toda mi formación ha ido orientada en el ámbito de la cronicidad.

A lo largo de mi trayectoria profesional he podido desarrollarme en el ámbito asistencial, el que más nos acerca a las personas. También he dedicado casi la mitad de mis años como enfermera a la gestión, un ámbito que me ha permitido conocer la situación desde otro prisma y que me ha ayudado mucho en el desarrollo personal y la gestión de las personas.

Desde hace varios años, también colaboro con la Universidad de Manresa, como docente en el grado de enfermería. Creo que la docencia es también un área que me ha sumado como enfermera, pudiendo transmitir mis experiencias y mis conocimientos a los alumnos.

¿En qué momento profesional te encuentras?

Actualmente y desde el 2021 ejerzo como enfermera asistencial, después de la pandemia al frente del colectivo de enfermería de mi centro, cambiaron mis prioridades y necesitaba estar más cerca de los usuarios y sus familias.

Trabajo en el Hospital Sant Andreu de Manresa, es un centro de atención intermedia donde intentamos orientar los recursos necesarios para cubrir las necesidades sanitarias y sociales en el territorio y nuestra región sanitaria, la Catalunya Central.

¿Tienes clara tu orientación profesional al finalizar el máster? 

Al iniciar el máster mis metas profesionales no se vieron modificadas, pero a medida que nos han ido introduciendo más en el sector y el largo trayecto que tenemos por delante los sanitarios, me ha hecho replantear, en parte, mi futuro profesional.

Reconociendo que la investigación no es fácil, cursando este máster, sí me he sentido atraída hacia la idea de profundizar más en investigar, sobre todo a nivel de mi institución. Mi objetivo es mejorar intervenciones enfermeras y trabajar con una mayor y mejor evidencia científica, aunque también intentar inculcar a mis compañeros que hay que innovar y avanzar.

Has recibido asesoramiento por parte del servicio de formación permanente o por la directora de tu máster, ¿cómo fue esta experiencia?

Sí, con la directora del máster, Esther Cabrera, que además ha tutorizado mi trabajo de final de máster. He podido transmitirle cuales serían mis aspiraciones después de finalizar el máster, para poder seguir avanzando en el campo del cual realizo mi proyecto: las heridas crónicas. Considero que es un campo en el cual las enfermeras podemos desarrollar un rol autónomo y crecer y mejorar en la gestión de las mismas, pero siempre con el respaldo de la investigación enfermera, para así contribuir a la mejora con fundamento científico.